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Mi revolución, mi rebeldía

  • Foto del escritor: rivermibuenamigoarg
    rivermibuenamigoarg
  • 6 jun 2015
  • 2 Min. de lectura

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Un día como hoy, pero hace 365 días Gallardo asumía como flamante técnico del Millonario. Tras el espacio que dejó la salida de Ramón Diaz tras coronarse campeón y super campeón del primer semestre del 2014, el Muñeco aparecía para ocupar su banca.

Entre miradas de re ojo y dudas el ex jugador del Millonario llegaba a Nuñez pero desde otro puesto al que estábamos acostumbrados a verlo. Entre esos comentarios por lo bajo desde el otro lado del Río de la Plata llegaban mensajes de buenos deseos y grandes comentarios para el técnico del Millo rompiendo los primeros papeles de los pronosticadores.

Así llego Marcelo, con un grupo nutrido y con nuevas alternativas de entrenamiento como la neurociencia, el estudio táctico más profundo de los rivales y movimientos para lograr mayor dinámica. Debutó con partidos con resultados flojos, con vuelta de jugadores que fueron discutidos pero con el correr del tiempo y acomodando pequeñas piezas el equipo comenzó a tener un gran vuelo, conseguir grandes resultados positivos, invictos y consiguió algo que era complicado, mantener un nivel de juego muy bueno de todo un equipo en general.

En el plano internacional el equipo impuso su estilo, supo como jugar de visitante y en los momentos críticos supo salir adelante a pesar de las adversidades. Supo inculcar a los jugadores que todos son igual de importantes a pesar de las experiencias, edades o consideración dentro del equipo.

Desde la mirada del hincha ''quemó las naves en los momentos justos'', el ejemplo más claro el Superclásico en River, Pezzella de 9. Bancando a jugadores que no lograban hacer pie o que cometían muchos errores como Funes Mori, Ponzio luego de la lesión de Kranevitter por el torneo de transición y dándole confianza a varios jugadores a postar a más para crecer desde lo profesional y probar nuevas posiciones como el caso de Driussi.

En un año sacó 2 títulos internacionales, una eliminación y media ante Boca por certámenes de dicha magnitud. Siempre acompañado por su hijo cerquita del banco y por su compañera que desde noviembre lo mira desde el cielo.

Llegaste para armar revolución, impusiste la rebeldía dentro de un grupo para que cada uno de ellos sepan que pueden armar lío dentro de la cancha. Fuiste el que le dio la puntada final a una etapa de malos recuerdos. Etapa que la inició Almeyda con el ascenso, la siguió Ramón con los títulos locales y vos la finalizaste poniendo a River en el lugar que siempre tiene que estar, ahí arriba en el primer plano.

Hace 1 año, la revolución llegó a River, llegó con un proyecto comandado por el Muñeco Gallardo.

06/06/2015

21:48 hs

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