Desdibujado
- Iván Andrés Valdés
- 22 nov 2016
- 3 Min. de lectura
Hace dos semanas atrás, lo mejor que nos podía haber pasado es que venga el ‘’parate’’ de las eliminatorias, para bajar un cambio y mejorar. Esos días se supone que iban a servir para mejorar en algunos aspectos y recuperar a varios jugadores, pero creo que esto no terminó siendo así. River demostró una pálida imagen ante Newell’s, comenzó a perder un poco de terreno en el torneo local que lo tiene como puntero a Estudiantes a 10 puntos (aunque hay que reconocer que todavía faltan 20 fechas más).
El equipo mostró falencias en el sector defensivo, que en varias oportunidades pudo hacer caer en posición adelantada a los atacantes de la ‘’Lepra’’, pero se dieron varios errores que generaron contras. Esto se dio sobre todo con Mina, otra fue la imagen de Martinez Quarta que tuvo un debut más que aceptable. Otro tema a tener en cuenta fue la situación de Mayada, jugador de la posición de ocho, pero que ya tiene antecedentes jugando de cuatro y de tres, con la desventaja que conlleva jugar con el perfil invertido.

Por lógica, su mejor lugar es en su posición pero también porque durante el primer semestre tuvo buenas sociedades con D’alessandro. Pero en ese tiempo, estaba Mercado jugando de cuatro que tenía las ventajas de atacar y defender, a comparación de Moreira que tiene un perfil sumamente ofensivo. Creo que el mismo Andrés pierde terreno al querer avanzar al campo rival y esto termina generando la falta de profundidad que sufre desde hace varios encuentros atrás.
Otro tema de suma preocupación es la desconexión que sufren los mismos delanteros, sin dudas que el principal perjudicado es Alario, que está pagando con bajos rendimientos, pocas intervenciones con la pelota. Driussi también lo sufre, pero a él se le presenta al menos alguna situación que sabe aprovechar, algunas con la fortuna de convertir y en otras con la chance que es atajada por el arquero rival. A ellos le falta ese jugador que pueda darle una mayor interacción y no tengan que bajar tanto de su posición para tener contacto con la pelota.
Otra cuestión que generó algo de polémica es la ausencia de un tres ante la lesión de Casco, allí Gallardo busca la experiencia con jugadores con Moreira o Mayada (como mencioné párrafos anteriores) y no buscar alguna alternativa con las inferiores, con un jugador que conoce del puesto. Creo que también hay que tener en cuenta que el Club no viene sacando jugadores en esa posición, es más Martínez fue el último pero terminó emigrando a otros equipos.
El sector izquierdo también sigue siendo otro inconveniente, un lugar que nunca tuvo un jugador que se haya afianzado en ese sector, salvo pequeños lapsos con Martinez, Fernández, Driussi. Quizás sea uno de los sectores más sensibles que nunca pudo recuperarse de la partida de Rojas. Quizás ese sector pueda ser una alternativa para D’alessandro o ponerlo en el sector de enganche para que pueda darle la profundidad que River anda necesitando desde hace tiempo.
Lo bueno es que el técnico se está dando cuenta que las cosas no están funcionando, pero igual debe hacer un cambio de esquema. Esto lo digo porque se ve un equipo que no lastima y que deja aislados a sus delanteros, que además suma problemas defensivos a la hora de contener los ataques o quedar en desventaja a comparación del rival. En parte podemos justificar la ausencia de jugadores fundamentales como Maidana y Ponzio, pero los suplentes deben tratar de suplir esas ausencias, como en su momento lo hicieron jugadores como Pezzella o Kranevitter cuando eran suplentes.
En definitiva, River ya deben encender las alarmas: primero porque se vienen partidos fundamentales (a tres fechas del Superclásico) y con la necesidad de poder acceder a la ronda final de la Copa Argentina. Esto último que termina siendo el pobre objetivo de este semestre. El equipo definitivamente está desdibujado.
22:23.
16/11/2016


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